Macron dice que los agoreros de los JJ.OO. han perdido y el espíritu de unidad ha ganado

París, 12 ago (EFE).- El presidente francés se muestra muy satisfecho del desarrollo de los Juegos Olímpicos, gracias a un gran trabajo colectivo, a su parecer, que muestra que "cuando Francia está unida, sabe hacer grandes cosas", mientras que los perdedores son los agoreros que anticipaban que todo sería un fracaso.

El presidente de la república francesa, Emmanuel Macron (3d-arriba), saluda al presidente del COI, Thomas Bach, durante la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de París 2024 celebrada el domingo, en el Estadio de Francia en Saint-Denis (Francia). EFE/ Lavandeira Jr
El presidente de la república francesa, Emmanuel Macron (3d-arriba), saluda al presidente del COI, Thomas Bach, durante la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de París 2024 celebrada el domingo, en el Estadio de Francia en Saint-Denis (Francia). EFE/ Lavandeira Jr

París, 12 ago (EFE).- El presidente francés se muestra muy satisfecho del desarrollo de los Juegos Olímpicos, gracias a un gran trabajo colectivo, a su parecer, que muestra que "cuando Francia está unida, sabe hacer grandes cosas", mientras que los perdedores son los agoreros que anticipaban que todo sería un fracaso.

"Hay un perdedor, el espíritu de derrota. Todos los que nos explicaban desde hace siete años que era una locura acoger los Juegos Olímpicos", señala Macron en una entrevista publicada este lunes por L'Équipe, al día siguiente de la clausura.

Recuerda a los que habían anticipado que la ceremonia de apertura en el río Sena "era una inconsciencia en términos de seguridad", a los que auguraban que Francia no tendría muchas medallas, que los JJ.OO. serían "un agujero financiero", que no sería posible descontaminar a tiempo el Sena para permitir el baño y organizar algunas competiciones allí.

"Al final -concluye- lo hemos conseguido. Es formidable, es el fruto de un trabajo colectivo. (...) Es la demostración de que Francia cuando está unida, sabe hacer grandes cosas".

Insiste en que la ceremonia de apertura "fue un momento formidable lleno de audacia, de espíritu francés". Y cuando se le pregunta por las críticas, que se centraron en la supuesta parodia de la última cena de Jesucristo con los apóstoles, y que vinieron de la Iglesia Católica y sobre todo de la extrema derecha, sin entrar en el fondo de la cuestión, la defiende.

"Que haya desacuerdos y gente que no está contenta, eso es parte del debate. Pero después, lo que no acepto es el insulto, el odio, las amenazas. Nunca. Lo que constato es que a una mayoría aplastante de nuestros compatriotas le encantó esta ceremonia y que dimos una formidable imagen de Francia, de audacia, de conquista, de un gran relato de lo que es nuestro país".

El presidente asume la elección como director artístico de Thomas Jolly, el que concibió esa escena y todo lo demás, "porque somos una democracia viva".

Felicita a los que han estado implicados en la organización, como los voluntarios, y en particular las fuerzas del orden. También a los deportistas franceses, que han conseguido terminar en quinta posición en el medallero.

Preguntado sobre qué campeones o qué resultados le han emocionado más, Macron se refiere entre otros a la selección de fútbol, que perdió en la final frente a España, y rinde homenaje al seleccionador, Thierry Henry, del que destaca que tuvo que afrontar muchas dificultades.

"Francamente, en este asunto no nos ha ayudado todo el mundo, no nos vamos a engañar", dijo Macron, que no dio nombres al respecto.

Más adelante, cuando la cuestión directa es si lamenta la ausencia del delantero estrella Kylian Mbappé, que acaba de fichar por el Real Madrid (que se negó a que compitiera en los JJ.OO.), su respuesta, asegurando que no señala a nadie, es que "todos los que no han creído en los Juegos se han equivocado, en la organización como en el deporte, porque valía más estar".

En un análisis de política interna, el jefe del Estado repite el argumento de que los Juegos han funcionado porque todos han trabajado juntos, y alude a la alcaldesa de París, la socialista Anne Hidalgo, y a la presidenta de la región Ile de France, Valérie Pécresse, con las que competía hace tres años por el Elíseo.

Macron defiende la disolución de la Asamblea Nacional, que decidió en junio, y que se tradujo en unas elecciones legislativas anticipadas que han dejado una situación de empantanamiento político, que ahora es su mayor desafío para que se pueda constituir un nuevo Gobierno.

"Cuando se tienen objetivos comunes, cuando se trabaja en común, no hay nada insuperable", afirma.