Y ahora Wembanyama

París, 9 ago (EFE).- Como si se tratara de un cohete que va soltando sus diferentes componentes para alcanzar las estrellas, así los ídolos de Francia están racionando sus hazañas en los Juegos de París para que no decaiga el entusiasmo popular.

Victor Wembanyama celebra la clasificación de Francia para la final del torneo de baloncesto de los Juegos Olímpicos de París 2024, tras imponerse a Alemania. EFE/EPA/YOAN VALAT
Victor Wembanyama celebra la clasificación de Francia para la final del torneo de baloncesto de los Juegos Olímpicos de París 2024, tras imponerse a Alemania. EFE/EPA/YOAN VALAT

París, 9 ago (EFE).- Como si se tratara de un cohete que va soltando sus diferentes componentes para alcanzar las estrellas, así los ídolos de Francia están racionando sus hazañas en los Juegos de París para que no decaiga el entusiasmo popular.

El último capítulo lo ha firmado la selección de baloncesto, flamante finalista, liderada por Victor Wembanyama, que ha elevado el entusiasmo de un país que está viviendo un sueño durante sus Juegos.

El larguirucho de los San Antonio Spurs desafiará a los gigantones de la NBA de Stephen Curry, Kevin Durant y Antonhy Davis, y si lograran la gesta de derrotarles, el país entero entraría en éxtasis.

Lo bordea desde que empezaron los Juegos y comenzó el goteo de medallas, que ha sido incesante y que sitúan a Francia en cuarta posición, dentro del top-5 que se habían marcado como resultado, aunque lejos de los 80 metales que habían augurado los principales responsables del olimpismo galo.

Más allá del número, Francia ha encontrado un rosario de estrellas a las que adular y que les han mantenido pendientes de las televisiones, de las pantallas gigantes, en permanente comunión con los Juegos.

Antoine Dupont, abre fuego

El capitán del equipo de rubgy a 8 se sacó la espina del fracaso del XV en el Mundial que ellos organizaron el año pasado. Lesionado, Dupont apenas pudo aportar nada a que Francia lograra el título mundial, pero en los Juegos fue clave para el oro de los franceses, el primero que resonó en todo el país.

El rugby es un deporte muy popular en Francia y su carismático capitán uno de los deportistas más queridos y seguidos del país.

Marchand, el rey de los Juegos

Tomó el relevo en la piscina un joven tímido y poco conocido, pero con todos los mimbres para convertirse en un icono. Tenía tantas esperanzas puestas en sus brazos que había miedo a un fracaso monumental. Pero Léon Marchand demostró arrestos e, incluso, apuntó su nombre a la lista de pretendientes a integrar la historia de la natación.

Cuatro oros y un bronce le propulsaron directo a convertirse en uno de los personajes de los Juegos, quizá el gran triunfador, el que más ríos de tinta ha hecho correr, en un deporte rey de la competición olímpica.

Sus éxitos fueron los más aclamados, el país se paralizó para verle bracear en la piscina y cada una de las veces que detuvo el crono en primer lugar, en todas las sedes olímpicas se escuchó La Marsellesa en las gargantas de los enfervorecidos aficionados.

Riner agiganta su leyenda

Apenas acabado el rescoldo de los éxitos de Marchand, Teddy Riner se impuso como el gran rey del judo añadiendo a su ya impresionante palmarés una nueva medalla de oro, la quinta en otros tantos Juegos, la tercera individual, que le convierten en el deportista francés más laureado.

Uno de los deportistas más populares del país, rostro de numerosas marcas, líder en las encuestas de los más queridos por los franceses, el gigante de 35 años demostró que es un seguro para el medallero galo y Francia volvió a gritar con locura su nombre.

Félix Lebrun

El contrapunto de Riner fue un joven de 17 años que aparenta menos, con cara de empollón y que canaliza su timidez con una agresividad sobre la mesa de tenis.

En medio de la dominación asiática sobre su deporte, Lebrun conquistó un bronce que supo a gloria a Francia, sobre todo por la figura entrañable del joven, que mantuvo a los espectadores pendientes de un deporte al que están poco habituados.

Y ahora 'Wemby'

El pistón de combustible parece reservado al equipo masculino de baloncesto, liderado por 'Wemby', que aunque no está completando su mejor torneo, es quien atrae más miradas.

La final contra Estados Unidos será el momento culminante de los Juegos para los franceses, la puerta abierta a la apoteosis total.

Luis Miguel Pascual